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EL AMOR QUE HUELE A PÓLVORA


 

Para: Mi amor

Yo sé que no te gusta leer mucho, pero te pido en esta ocasión que hagas un esfuerzo y en nombre de este profundo amor que nos une, leas hasta el final cada línea de esta carta, tal vez la última que me alcance la vida por escribir. Amor, te pido sólo una cosa, lee con el corazón porque con el corazón te estoy escribiendo. No tengo talento con las palabras de forma oral, creo que me hago entender mejor cuando escribo. Son las dos de la madrugada en esta ciudad tan fría y no logro conciliar el sueño de tanto pensar en nuestras vidas.

La semana pasada después de hacer el amor como nunca antes lo habíamos experimentado me sentí la persona más feliz de todas las que habitan en este planeta. Te juro amor, que no encuentro palabras para definir la textura de tu piel, ese aroma sublime de tus cavidades que me enloquece y la manera tan particular de tus gemidos cuando logras un orgasmo. Dios, cómo definir en palabras esa perfección de tus ganas. Me haces feliz, inmensamente feliz y quiero que lo sepas, aunque muy en el fondo yo sé que lo sabes, pero quiero dejar testimonio de este gran amor que siento por ti y que la vida nos ha regalado.

Aquí todo es pesadumbre y desolación. El recuerdo de tus besos es lo que me motiva a seguir adelante, aunque no sé por cuánto tiempo. Siguen cayendo bombas, continúan los ataques, esta pobre gente no tiene cómo defenderse y sólo cuentan con nosotros, pero nosotros tampoco tenemos cómo defendernos. Desearía regresar a mi país contigo. Enseñarte mi cultura, mostrarte las calles que recorrí en mi infancia y besar tus manos frente al jardín de mi madre. Quisiera tener el valor para defender de la misma manera nuestro amor. Perdóname por ser un cobarde, por creer que todo lo que dicta la sociedad es lo correcto. En el futuro no me juzgues por no tener la valentía de buscarte, por no tener el coraje de ir contra el sistema y gritarle al mundo que te amo, pero es tan complicada la forma que nos ha tocado vivir esto que no sé cómo asumirlo. Te amo, es lo único que tengo claro. Amo tus locuras, amo cuando me miras después de hacernos el amor en el sofá, amo cuando me pides que te bese una y otra vez. Amo tu sudor cuando me abrazas por las tardes. Amo tu respiración cerca de mi cuello cuando me haces el amor desenfrenadamente y la forma como acaricias tus labios con la lengua para seducirme. Amo tu frente y tu espalda, tus cóncavos y tus convexos. Amo el claro oscuro de tus formas, lo dulce y lo salado de tu piel. Amo el vientre de tu madre por haberte tenido. Amo el momento en que tus padres se unieron para concebirte. Te amo de mil maneras, de mil formas, sin condiciones, sin compromisos, sin pasado y sin futuro. Te amo de manera presente, te amo en tiempo real. Te amo en el aquí y el ahora. ¡Te amo!

Sé que te harás mil preguntas. Sé que pensarás que tanto amor que se escribe no se demuestra, pero tú sabes que sí existe y que es verdadero. Te lo he demostrado. Perdóname, sé que ha sido atrincherado, que ha sido más la angustia de vernos que el placer de tenernos. Pero te prometo amor que todo cambiará muy pronto. Cambiaré este uniforme por las ganas que tengo de pasar el resto de mi vida contigo, a pesar de lo difícil que pueda ser, no me importa. Esa será la mejor guerra que me toque vivir. Espérame, dame una oportunidad. Te juro por mi vida que quiero escribir mi historia contigo. Te hago el amor en la distancia todos los días. Todas las noches beso el pañuelo que me diste con tu aroma. Me vuelvo loco sin tu amor.

Recuerda mirar nuestra estrella cada noche y besarme a través del viento gélido de tu lejano país. Cuídate mucho. Espero que esta carta llegue a tus manos. Y pase lo que pase, nunca olvides que te amo. Que eres y serás siempre el gran amor de mi vida. Eres la justificación de mi cuerpo y mi presencia en este mundo. Te amo.

De: Tu amor.

Publicado el 26/02/2012
Alexander Otaiza
Hombre sencillo, alegre y romántico. Amante y defensor de la vida por sobre todas las cosas. Agradecido con la mía por lo generosa que ha sido. Admirador  y  respetuoso de la mujer. Soñador, pero con los pies en la tierra. Mi meta, hacer historia y dejar huellas. Mi deseo, ver feliz a mis seres amados  y  el progreso de mi país (Venezuela).